Interesante opinión de María Zajárova sobre Haití y el bombardeo de los Nord Stream

¿En qué medida EEUU no está implicado en los atentados con explosivos contra los Nord Stream: en la misma en que no lo está en el asesinato del Presidente de Haití o en el fraude con las probetas para invadir Iraq?

Damasco, 22 feb (SANA) Los estadounidenses afirman ahora que no tienen nada que ver con el bombardeo de los gasoductos Nord Stream, aunque los datos de la investigación del eminente periodista Seymour Hersh están a disposición de todos.

Entendemos que entienden que todo el mundo entiende que esto es mentira.

Y ni siquiera es que la única respuesta adecuada a la antigua pregunta jurídica Cui bono (¿Quién se beneficia?) sea EEUU, sino que los estadounidenses simplemente mienten. Podría recordarles de nuevo la historia del tubo de ensayo exhibido por el Secretario de Estado de EEUU, Colin Powell, pero si les aburre, hay muchas otras.

Hay un pequeño país llamado Haití. Tuvo mala suerte: fue colonia, primero de España, luego de Francia, y después cayó bajo la ocupación estadounidense durante décadas. Cada una de las metrópolis se llevó lo que pudo de la isla y sus habitantes, dejándoles pobreza y devastación.

La guerra fría en el Haití caliente fue terrible. Francois Duvalier, antiguo médico de la misión sanitaria estadounidense, nacido en Haití, instauró una auténtica dictadura, con represiones, detenciones y violaciones de los derechos humanos que hielan la sangre con los detalles, incluidas decapitaciones y torturas con baños de ácido. ¿Por qué los estadounidenses no defendieron los derechos humanos? Es muy sencillo: necesitaban a Duvalier como anticomunista, porque la Cuba de Fidel Castro estaba justo al lado. Washington incluso dio dinero al dictador loco mientras hablaba de democracia.

Ya en la década de 1990, los estadounidenses dejaron por fin de respetar la soberanía de la república insular. En 1994, por ejemplo, presionaron al Consejo de Seguridad para que autorizara una operación militar especial en el país con el fin de reinstaurar en la presidencia al útil Jean-Bertrand Aristide. Lo consiguieron. Y luego, cuando se hartaron de él, lo secuestraron y se lo llevaron a África. Así es como ayudaron a construir la democracia bajo George Bush.

Analicemos la ayuda real prestada por EEUU a Haití. En 2010, la isla fue azotada por un horrible terremoto que se cobró centenares de miles de vidas humanas. El número de afectados sobrepasó medio millón. EEUU asignó 380 millones de dólares. ¿Parece una suma apreciable? Pero tan solo los comicios presidenciales en EEUU cuestan 15 veces más caro. Por cierto, Joe Biden prometió a Zelenski mucho más que a sus “aliados y amigos” de Haití en la etapa más horripilante de su historia.

Luego, en 2021, el Presidente de Haití, Jovenel Moïse, fue simplemente asesinado a balazos junto su esposa Martin.

En el espacio informativo occidental no tardaron en aparecer suposiciones sobre la implicación de los estadounidenses.

Esta semana, la Secretaría de Justicia de EEUU emite una escasa nota de prensa anunciando el arresto de otros varios estadounidenses vinculados a la empresa militar privada CTU Security. Las autoridades oficiales de Caracas comunican que en su tiempo esta empresa estaba implicada en el fallido atentado contra el mandatario venezolano, Nicolás Maduro. Paralelamente, en las audiencias del Consejo de Seguridad sobre la situación en Haití el representante de EEUU anuncia la intención de contribuir a la promoción de la democracia, a la celebración de unas elecciones honestas y el apoyo a las organizaciones sin ánimo de lucro.

Pero procede señalar que los estadounidenses ocupan el país cuando se les antoja, destituyen y designan a los presidentes, cuando no los asesinan simplemente. He aquí los datos estadísticos: Haití ocupa el 170 puesto (de los 199) por el PIB per cápita, uno de cada dos habitantes de las islas Caribeñas infectados del VIH es haitiano.

El Secretario General de la ONU exhorta a desplegar una misión internacional ad hoc para detener el constante agravamiento de la situación, mientras Robert A. Wood, igual como sus colegas del Departamento de Estado en los años anteriores, cuenta en el Consejo de Seguridad sobre cómo EEUU “ayudará a Haití”.

Es una historia sumamente aleccionadora para Zelenski quien tan afectuosamente abrazaba a Joe Biden en la parte céntrica de Kiev. Cómo uno debe odiar a su pueblo para desearle las perspectivas de la sufrida Haití.

¿En qué medida EEUU no está implicado en los atentados con explosivos contra los Nord Stream: en la misma en que no lo está en el asesinato del Presidente de Haití o en el fraude con las probetas para invadir Iraq?

Fuente: Cancillería rusa

Check Also

Cosecha de trigo en Deir Khabiya, Damasco-campo (fotos)

Damasco-campo, 28 jun (SANA)  sm