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El patriarca de Antioquía y Todo Oriente, y jefe supremo de la Iglesia Siríaco-Ortodoxa en el mundo, Mar Ignatius Aphrem II, llamó a los jefes y representantes de las misiones diplomáticas acreditadas en Damasco a trasladar a la comunidad internacional el sufrimiento del pueblo sirio a consecuencia de las medidas coercitivas unilaterales impuestas por Occidente.
Damasco, 1 feb (SANA) El Patriarcado de la Iglesia Siríaco-Ortodoxa de Antioquía y Todo Oriente organizó en la Catedral Patriarcal Ortodoxa de San Jorge en Damasco, una recepción con motivo del año nuevo, a la cual asistieron los jefes y representantes de las misiones diplomáticas acreditadas en Siria.
El patriarca de Antioquía y Todo Oriente, y jefe supremo de la Iglesia Siríaco-Ortodoxa en el mundo, Mar Ignatius Aphrem II, llamó a los jefes y representantes de las misiones diplomáticas acreditadas en Damasco a trasladar a la comunidad internacional el sufrimiento del pueblo sirio a consecuencia de las medidas coercitivas unilaterales impuestas por Occidente.
El silencio y el desinterés de los medios de prensa internacionales respecto al impacto de estas sanciones contribuye a exacerbar el sufrimiento del pueblo sirio, afirmó.
El patriarca agradeció a los jefes y representantes de las misiones diplomáticas por apoyar a Siria y su pueblo, y por el apoyo de sus países a la firmeza de los sirios durante este difícil período que están atravesando.
Expresó su deseo de que contribuyan a levantar lo antes posible las medidas económicas coercitivas unilaterales impuestas a Siria, y que la ayuda económica que se brinda a los desplazados sirios se transfiera para contribuir a la reconstrucción y restauración de las zonas que fueron destruidas y facilitar el regreso de los desplazados a su patria.
El embajador del Vaticano en Siria, el cardenal Mario Zenari, dijo que este encuentro es una buena oportunidad para intercambiar puntos de vista sobre cómo contribuir a paliar el gran sufrimiento del pueblo sirio, que quiere reconciliación, paz y prosperidad.
A su vez, la encargada de negocios de Suecia en Damasco, Anne Desmoet, esperó que la seguridad y la paz prevalecieran pronto en Siria y que vuelva la prosperidad tal como era.
Mientras el embajador iraní en Damasco, Mahdi Sobhani, reafirmó el apoyo de su país a Siria en todos los sentidos y sugirió levantar las sanciones al pueblo sirio en lugar de brindar ayuda.
fm
