Las antiguas murallas de Palmira resisten guerras y desastres naturales

Homs, SANA

Las murallas defensivas de Palmira, que fueron construidas por los Palmirenses en el siglo I, son uno de los monumentos arqueológicos más destacados de la ciudad. Consisten en una serie de fortificaciones defensivas que se extienden desde la ladera sur de una colina situada al oeste de la ciudad y rodean el templo de Baal.

Algunas partes de las murallas defensivas fueron destruidas a manos de los invasores romanos que atacaron a Palmira en los años 272 y 273 d.C.

“En el 41 a.C., los Palmirenses decidieron construir un “muro de aduanas” alrededor de su ciudad para protegerla de los merodeadores e invasores después de que el líder romano Marco Antonio invadiera la ciudad de Palmira debido a su riqueza en tesoros, ya que era un centro comercial internacional en la Ruta de la Seda”, dijo el secretario del Museo de Palmira al reportero de SANA.

“Hoy en día, todavía hay algunas partes del muro de aduanas en la montaña al-Mintar”, agregó al-Hariri.
Indicó que después de expandirse el comercio de la ciudad, los palmirenses establecieron un muro defensivo de seis kilómetros de largo para proteger a la ciudad de Palmira de la codicia de sus enemigos. El muro estaba hecho de piedras talladas que tienen torres cuadradas con intervalos de 37 metros que se construyeron durante el reinado de los monarcas Uthaina y Zenobia.

La muralla fue renovada varias veces en la era de los emperadores romanos después de que la ciudad había sido golpeada por varios terremotos.

Desde 1957, la Dirección General de Antigüedades y Museos ha realizado excavaciones y ha reconstruido las partes destruidas de los muros del norte desde la esquina norte del Museo Nacional hasta llegar a la cima de la colina detrás del Campamento de Diocleciano, un complejo militar romano construido en la Antigua ciudad de Palmira.

Las excavaciones llevadas a cabo por expediciones nacionales en el sitio de las paredes demostraron que las paredes consisten en estructuras dobles de 310 cm de ancho, cuya parte frontal fue construida de piedra caliza, mientras que la parte interna de la pared fue construida de cal suave.

Las paredes están rodeadas por una zanja con una profundidad de cinco metros y tienen una anchura de 8 metros y una altura de 5 a 6 metros, teniendo en cuenta que la altura de las paredes era de 12 metros en el pasado y solían tener siete puertas, tres en el muro norte y otras tres en la parte sur.

E. Dubian/ Riad Sh.

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