Damasco, SANA
El presidente Al Assad concedió una entrevista a la Televisión de Bielorrusia, la cual coincidió con el Día de la Victoria de la Unión Soviética y sus aliados sobre el nazismo.
En la entrevista el mandatario sirio subrayó que “el terrorismo es un mero instrumento que se usa por aquellas potencias occidentales que aplican la misma mentalidad nazi supremacista, o sea convertir a los estados y pueblos en esclavos serviles y controlarlos material y moralmente, por tanto el terrorismo es un simple instrumento y un subproducto”.
Señaló que el rol fundamental de los viejos combatientes en reforzar el espíritu de firmeza porque Bielorrusia afronta hoy algo parecido a lo que afronta Siria desde hace décadas, pues “ustedes están bajo bloqueo y el presidente Lukashenko está siendo demonizado, al igual que el presidente Putin últimamente, porque no se arrodillan ante Occidente, pues si las anteriores generaciones no se inclinaron ante Hitler entonces las actuales generaciones no deben inclinarse ante el neo nazismo representado en el colonialismo occidental en su versión más reciente”.
Acerca de las razones de la firmeza del pueblo sirio, el presidente Al Assad aseguró que “el pueblo sirio es un pueblo patriótico” y ha podido contrarrestar el plan occidental necio en sembrar el sectarismo entre los individuos de la sociedad siria.
Añadió que Occidente pintó esa guerra como “una guerra por conservar el cargo”, mientras que el pueblo sirio ha estado consciente que esa guerra es por el control de Siria.
En cuanto al ataque químico en Idleb y el golpe con misiles contra el aeropuerto de Al Shayarat el presidente al-Assad aseveró que es “una operación planeada” y una parte de la campaña de demonización contra el Estado sirio”, y del plan de dar cobertura a la intervención militar estadounidense en Siria.
“Trump está en un embrollo interno, tiene conflictos intestinos dentro de su administración y tiene conflictos con otros poderes y lobbies en el concierto norteamericano, y con los medios y con los grandes carteles, por tanto quiso dar sus credenciales a esos grupos, y vino la cuestión del ataque químico que dio justificación a la intervención, y es una operación planteada”.
El presidente hizo hincapié en que Rusia e Irán presentaron un proyecto en la Organización de Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) y fue rechazado porque la investigación demostrará una sola cosa, que EEUU y Occidente mienten.
Asimismo afirmó que “Daesh, Al Nusra y Erdogán quien pertenece a la Hermandad Musulmana, tienen también la misma doctrina junto con la Casa de Saúd y la casa de Al Thani, a todos estos grupos los une la doctrina Wahabita, y todos ellos son instrumentos en manos de EE.UU.
“No digo Occidente porque Europa occidental no existe prácticamente en el mapa político. Europa protagoniza lo que quiere de ella EE.UU y sin objeción alguna”, precisó.
En lo referido a las acusaciones dirigidas por Occidente contra su persona, el presidente al-Assad criticó los criterios democráticos hipócritas de Occidente, señalando que los países occidentales han apoyado recientemente a Arabia Saudita para que sea miembro del Consejo de la ONU para Derechos de la Mujer o en el Consejo de la ONU para Derechos Humanos.
“Cuando [los responsables occidentales] atribuyen malas calidades a un político en otro Estado, esto significa que el mismo es patriótico”, señaló.
Y sobre el diálogo con la oposición, el presidente sirio hizo hincapié en que Ginebra por ahora es mero encuentro mediático, y no tiene nada real, porque ha sido un proceso destinado principalmente a empujar al Gobierno sirio a hacer concesiones.
Al Assad afirmó que él no hará ninguna concesión por una sola razón: “él no posee la patria”, y cualquier asunto relativo a la soberanía, la Constitución, la independencia o los intereses nacionales a no corresponde al presidente sino que al pueblo y se realiza mediante un referéndum.
En el mismo contexto, el mandatario sirio dijo que la iniciativa de Astana ha sido diferente porque se realizó bajo el patrocinio de Rusia, y luego Irán como garante al Gobierno sirio al lado de Rusia, y Turquía como garante de los terroristas. El presidente al-Assad señaló que esta iniciativa ha comenzado a dar resultados mediante más que un acuerdo de alto el fuego; el último ha sido el acuerdo de las zonas de distención.
En cuanto a estas cuatro zonas, el presidente al-Assad precisó que el objetivo principal detrás de esta iniciativa es en primer lugar proteger a los civiles, y en segundo lugar dar oportunidad a los armados que quieren reconciliarse con el Estado y deponer sus armadas. Asimismo es un chance concedida a los demás grupos para expulsar a los terroristas de Al Nusra y Daesh de dichas zonas, pero antes de todo la iniciativa tiene como objetivo principal detener el desangramiento hasta la adopción de pasos políticos locales entre el Estado sirio y los grupos existentes, seañló.
En cuanto al éxito de esta iniciativa, Al Assad dijo que esto depende de la manera de la aplicación de la misma, y de la capacidad de los países occidentales que alegan apoyarla de detener su apoyo logístico y el envío de más voluntarios a los terroristas en dichas zonas.
Enfatizó que las fuerzas sirias junto con las rusas, iraníes y las de Hezoblá golpearán a los terroristas si intentan violar el acuerdo.
Por lo que atañe a las acusaciones dirigidas contra el Estado sirio de que el mismo trata de imponer un cambio demográfico en el país, el presidente Al Assad dijo que las mismas carecen de veracidad, y explicó que el Estado sirio no expulsa a nadie de ninguna zona, y que el proceso de reconciliación da dos opciones a los habitantes de la área en cuestión o quedarse o salir, así como permite a los armados que desean normalizar su estatus jurídico y deponer sus armas quedarse, y a los que no desean hacerlo abandonar la zona, agregando que la mayoría de los armados que se salen de dichas zonas son los que rechazan la reconciliación.
Hablando del doble rasero de Occidente, el presidente Al Assad dijo que son pocos los países que se atreven a decir la verdad a nivel internacional o popular, haciendo referencia a Rusia, Bielorrusia, Irán y Corea del Norte.
“Estos países son etiquetados o como el eje del malo o países no democrático porque no van en el mismo rumbo de Occidente”, sostuvo.
El presidente Al Assad fustigó que a Occidente le importa sólo el terrorista, ni los derechos ni los seres humanos.
Por otra parte, el presidente sirio acogió con beneplácito cualquier papel de Bielorrusia en el arreglo de la crisis siria y en la reconstrucción del país, precisando que la última visita del Ministro de Industria bielorruso a Damasco que tuvo efecto hace pocas semanas, ha contribuido a reactivar algunos aspectos del convenio económico firmado en 2010, especialmente el ensamblaje de camiones Maz en Siria.
Riyad Sh., Lynn A.