Ginebra, SANA
El embajador permanente de Siria ante la ONU en Ginebra, Hossam Addin Ala dirigió un llamamiento a la ONU para que reaccione a las sanciones unilaterales impuestas al pueblo sirio y el terrorismo secundado por el exterior que está sufriendo este mismo.
En una reunión organizada por la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) sobre la situación humanitaria en Siria, el diplomático sirio criticó que la politización del asunto humanitario en Siria se ha convertido en un estilo permanente en los informes de los funcionarios de la ONU, lo que armoniza con los juegos de los países anti sirios.
Ala habló de la jornada sangrienta que vivieron las cuatro provincias sirias,Tartous, Homs, Damasco-campo y Hassakeh, el lunes pasado tras una serie de explosiones terroristas, asimismo mencionó los ataques arbitrarios con misiles que sufren los civiles a manos de terroristas clasificados por algunos países como “grupos moderados”.
Ala llamó a la ONU a dejar de ignorar la responsabilidad del terrorismo que se cobra la vida de los civiles y destroza la infraestructura de Siria en sus informes sobre la situación humanitaria en Siria.
Asimismo puso de relieve los enormes esfuerzos desempeñados por el gobierno sirio en la lucha contra el terrorismo, y su continúa colaboración con las agencias pertenecientes a la ONU y el Comité Internacional de la Cruz Roja para hacer frente a la crisis humanitaria causada por el flagelo del terrorismo.
Aclaró que las sesiones informativas presentadas por la OCHA y las agencias humanitarias carecen de varios puntos en materia de comprender de la situación humanitaria en el país. Entre estos puntos, lo de que el gobierno sirio, pese a la situación excepcional que atraviesa y el bloqueo económico impuesto a la misma, provee el 75 por ciento de las ayudas humanitarias a su población.
Resaltó que la cooperación entre el gobierno sirio y las organizaciones humanitarias posibilitó beneficiar a más de cuatro millones de afectados en el marco del plan de respuesta mensual, así como prestar desde el inicio del año actual hasta el 22 del pasado mes de agosto, ayudas a más de un millón y 550.000 personas en las zonas inestables.
Sin esta cooperación fuerte, el acceso de las ayudas humanitarias a las zonas estables e inestables no se hubiera realizado, dijo, criticando que los informes de la ONU pasan de alto esta realidad en sus informes.
“Quien escucha los informes y las declaraciones hechas por Stephen O’Brien, Secretario General Adjunto de Asuntos Humanitarios y Coordinador del Socorro de Emergencia en Nueva York y el asesor del enviado especial, Yan England en Ginebra, entiende que los mismos armonizan con los juegos políticos y mediáticos llevados a cabo por los países que adoptan una posición contra Siria”, señaló.
Resaltó que las imprudentes declaraciones emitidas tras el arreglo alcanzado para evacuar a los armados de Daraya, y la iniciativa humanitaria siria-rusa sobre los corredores humanitarios en Alepo son un modelo claro de las posiciones y los comunicados que emplean el sufrimiento del ser humano para lograr agendas políticas, de la misma manera con la que los armados utilizan a los civiles como escudos humanos para chantajear al gobierno sirio y la comunidad internacional.
Fustigó que la selectividad de la ONU a la hora de hacer llegar la ayuda humanitaria a los afectados en Siria, explicando que Kafreya y Foa son las únicas localidades que los convoyes de la ONU y el CICR no pudieron entrar desde el inicio del año en curso hasta la fecha.
Enfatizó que la ONU está esgrimiendo falsos pretextos para justificar su incapacidad de entrar en Kafareya y Foa y para evitar aplicar presiones tanto a los grupos terroristas que asedian a dichas localidades, como a los países que patrocinan a los terroristas.
Asimismo dijo que las cifras sobre la evaluación de las necesidades en las zonas sirias deben basarse a evaluaciones confiables, criticando la exageración sospechosa del número de los beneficiarios de las ayudas enviadas por la frontera, aclarando que este supuesto número llega a millones de personas en zonas donde la población no supera miles.
Denunció que la ONU sigue ignorando en sus informes el nefasto impacto de las ilegales e inmorales sanciones económicas impuestas por los países que “lloriquean” en las sesiones del Consejo de Seguridad por la situación humanitaria del pueblo sirio.
Concluyó que el éxito del arreglo político en Siria y la mejora de la situación humanitaria en este país dependen del compromiso de la comunidad internacional con la lucha contra el terrorismo, la coordinación con el gobierno sirio, y el levantamiento de las injustas sanciones unilaterales aplicadas al pueblo sirio.
Lynn A.