Nueva York, 15 nov (SANA) La utilización de la Asamblea General para manipular las reglas del trabajo dentro de la organización internacional y la imposición de mecanismos ilegales y sin precedentes a través de la presión y el chantaje se ha convertido en una práctica constante de los países occidentales para arremeter contra los estados miembros que no siguen sus agendas políticas de ciertos países, denunció hoy el representante permanente de Siria ante las Naciones Unidas, el embajador Bassam Sabbagh.
En su intervención durante una sesión extraordinaria de la Asamblea General sobre la situación en Ucrania, Sabbagh consideró que la escalada del conflicto entre Rusia y Ucrania se debe al apoyo de Occidente a la tendencia extremista ucraniana y la incitación continua de los neo -Nazis y proporcionarles armas, lo que se ha convertido en una amenaza para la seguridad de la región.
Ha quedado claro que los países occidentales insisten en fortalecer el estado de polarización política dentro de las Naciones Unidas y profundizar la división entre sus estados miembros al convocar repetidamente a tales reuniones destinadas únicamente a servir la agenda hostil de los países occidentales hacia Rusia, afirmó el delegado sirio.
Reitero la postura de Siria de que la solución de disputas y crisis regionales e internacionales no se debe lograr mediante el ejercicio del engaño, las políticas de aislamiento y exclusión, la imposición de sanciones o el establecimiento de mecanismos politizados, sino mediante la diplomacia y el diálogo, y marcó como necesario que la Asamblea General evite cualquier iniciativa que pudiera exacerbar el conflicto.
En cuanto al proyecto de resolución presentado ante la Asamblea General bajo el título: “el mecanismo de reparación para compensar daños y pérdidas y ayudar al pueblo ucraniano”, comentó que el mismo se presenta en el contexto de una serie de resoluciones desequilibradas, tendenciosas y provocativas impulsadas por Estados Unidos y sus aliados occidentales para atacar a Rusia.
Pretenden crear un mecanismo ilegítimo de compensación para robar los fondos y activos soberanos rusos, en una clara violación del mandato de la Asamblea General de las Naciones Unidas,
La política de doble rasero seguida por los países occidentales los llevó a enfocarse en temas específicos que sirven a sus agendas y, a cambio, ignoran sus responsabilidades por las acciones ilegales que cometieron durante las últimas décadas en varios estados miembros de Asia, África y América Latina, concluyó el representante sirio.
fm