Damasco, 14 nov (SANA) El Ministerio de Asuntos Exteriores de Siria reiteró su enérgica condena al ocupante turco por privar del agua potable a más de un millón de habitantes en la provincia nororiental siria de Hasakeh.
“Cortar el agua a los ciudadanos en Hasakeh y otras ciudades sirias es un acto inhumano y vil cometido por el ocupante turco y sus lacayos de organizaciones terroristas, y también por la milicia separatista FDS”, informó Cancillería por medio de un comunicado.
De acuerdo con el comunicado, los repetidos cortes de agua constituyen un castigo colectivo contra la población civil, especialmente para los grupos vulnerables como niños, mujeres y ancianos, además de ser un crimen guerra y de lesa humanidad.
El comunicado aseveró que las condenas ya no son suficientes y que la comunidad internacional debe moverse de inmediato para detener estas prácticas y violaciones.
mm/fm