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La Haya, 29 nov (SANA) El jefe de la delegación rusa ante la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), Oleg Ryazantsev, dijo que esta organización nunca ha sido un hogar común en el que todos los Estados miembros trabajen libremente, establezcan un diálogo respetuoso y lleguen a soluciones de las cuestiones urgentes.
“El desempeño de la OPAQ está empeorando mientras aumentan las tendencias de exclusión, y se desvaneció la práctica basada en el principio de toma de decisiones unánime, y a la vez, la atmósfera dentro de esta plataforma se politizó severamente”, citó la agencia de noticias TASS a la declaración de Ryazantsev publicada en el sitio web de la organización.
Ryazantsev agregó que el motivo de todo esto es el deseo de un pequeño grupo de países de someter el derecho internacional a las leyes inventadas por estos países, refiriéndose en este sentido a la decisión tomada en 2018 de encomendar a la Secretaría Técnica de la OPAQ la tarea de identificar los responsables del uso de armas químicas y formar el ilegítimo equipo de investigación e identificación que alegó que “Siria desplegó armas químicas”.
El funcionario ruso agregó que la estabilidad de la OPAQ se vio socavada por la campaña liderada por un pequeño grupo de países luego del presunto incidente de envenenamiento de Alexei Navalny en agosto del año pasado; y aseguró que Gran Bretaña, Francia, Alemania y Suecia estaban en la primera línea en esta campaña y son los que más intentaron ocultar la verdad sobre el accidente.
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