Pekín, SANA
Con la participación de Siria, representada por la Bouzeina Shaaban, asesora política y de prensa de la Presidencia de la República, arrancó este miércoles la segunda edición del Foro de Derechos Humanos (Sur-Sur). en la capital china, Pekín.
El evento al que asisten más de 300 figuras políticas, ministros, diplomáticos y académicos de 80 países, se celebra bajo el título: “La Diversidad de Culturas y el Desarrollo de Derechos Humanos”.
En un discurso pronunciado, Shaaban señaló que las potencias occidentales y EEUU se autoproclaman defensores de los derechos humanos pero en realidad están perjudicando gravemente este principio al inmiscuirse en los asuntos internos de los demás países, particularmente los del mundo árabe.
Agregó que estas potencias adoptan políticas injerencistas en Iraq, Libia y Siria, al mismo tiempo que hacen la vista gorda ante las violaciones de derechos humanos cometidas por “Israel” en Palestina ocupada y el Golán árabe sirio ocupado, donde el ente sionista ha intentado cambiar los rasgos de estos territorios usurpados con el fin de ocultar su identidad histórica original.
Enfatizó la necesidad de desarrollar un nuevo orden mundial que refleje los intereses de los países del mundo y respete su soberanía e independencia.
Shaaban subrayó que la guerra terrorista contra Siria contribuyó a desenmascarar la realidad de la postura occidental sobre el terrorismo, e hizo alusión a las medidas coercitivas unilaterales impuestas por EEUU a Siria, denunciando que las mismas se elevan al nivel de “sanciones colectivas”.
Recordó que Siria condenó enérgicamente la reciente decisión del Congreso norteamericano sobre las regiones chinas de Xinjiang y Hong Kong.
L.A/ F.M